Para elegir un buen vino, empieza por conocer tus preferencias personales (tipo de uva, intensidad) y considera el maridaje con la comida. Luego, lee la etiqueta para entender factores clave como la cepa (Malbec, Cabernet Sauvignon), la región, la añada y el productor. Finalmente, si es posible, pregunta a expertos y no tengas miedo de experimentar con diferentes opciones. 

Paso 1: Define tus preferencias y el contexto

  • ¿Para qué ocasión es? Decide si es para acompañar una comida, regalar o para disfrutar por sí solo.
  • ¿Qué tipo de comida lo acompañará? Considera el maridaje. Los vinos blancos son ideales para comidas ligeras y pescados, mientras que los tintos se combinan con carnes.
  • ¿Qué te gusta? Piensa si prefieres un vino más ligero y frutal (Sauvignon Blanc o Malbec joven) o uno con más cuerpo y complejidad (reserva o gran reserva).

Paso 2: Lee la etiqueta

  • Cepa (varietal): Es el tipo de uva. Busca la que te sea familiar o la que se adapte a tus gustos (por ejemplo, Pinot Noir es más ligero que Cabernet Sauvignon).
  • Región: La zona de origen puede influir en el sabor. Por ejemplo, un vino de Mendoza puede tener características diferentes a uno de Salta.
  • Añada: Indica el año de la cosecha. Un vino joven se toma rápido, mientras que una reserva o gran reserva tiene un proceso de envejecimiento más largo y complejo.
  • Productor: Cada bodega tiene un estilo único. Puedes experimentar con productores clásicos o más modernos.
  • Grado alcohólico: Te da una idea de la estructura e intensidad del vino.

Paso 3: Considera otros factores

  • Precio: No siempre es sinónimo de calidad. Hay vinos excelentes en distintos rangos de precio, evita pagar solo por la marca.
  • Opiniones: Lee reseñas o pide recomendaciones, pero recuerda que la mejor opinión es la tuya propia. Las opiniones de un grupo suelen ser más acertadas que las de una sola persona.
  • Asesoramiento: Si tienes dudas, consulta a un sommelier o a nuestros especialistas en nuestra tienda de vinos. Ellos pueden guiarte según tus preferencias.
  • Experimenta: No temas probar cosas nuevas. La mejor forma de aprender es probando diferentes estilos y cepas para descubrir lo que más te gusta.